martes, 29 de octubre de 2013

Arañas para Hallowen!!!



Hola a tod@s!
Me gustaría compartir con vosotr@s esta entrada que publiqué hace ya algún tiempo y que me parece muy idónea para las fechas en las que estamos...si queréis sorprender a los vuestros o pasar una tarde entretenida con los niños estas arañas divertidas harán las delicias de grandes y pequeños...ahora sólo os falta un disfraz handmade de una malvada bruja o un señor esqueleto y a recorrer vuestro vecindario...truco o trato?


Hola a tod@s!
Se acerca el cumpleaños de mi hija Ariana, el 3 de febrero, 5 añitos nada menos!!!! y como cada año comienzo a pensar qué tipo de pastel podría hacer para ese día tan especial. Siempre intento sorprerder a mi familia, ver su cara cuando les enseño el resultado final...no tiene precio!!
Os mostraré lo que hice para el tercer cumpleaños de mi hija.
En la guardería nos dieron las siguientes consignas: algo fácil de repartir y sin demasiadas chuches...Tras mirar revistas de cocina y páginas por internet,por fin, encontré lo que quería...





Os explicaré el proceso:

- Comprar magdalenas pequeñas de chocolate
- También necesitaremos tiras de regaliz rojo para las patitas. Hacemos un pequeño agujero ayudándonos con un palillo e introducimos las diferentes tiras (4 a cada lado)
- Bañarlas con chocolate de cobertura, que una vez desecho se unta con un pincel o vas introduciendo la magdalena en el cazo.
- Antes de que se seque y se endurezca, se echarán virutas de chocolate como si fuera el propio pelo.
- Para los ojos y nariz utilizaremos diferentes chuches: los ojos son tiras de regaliz cortadas con el grosor deseado, y la nariz, hay de varios tipos, lacasitos pequeños o como una especie de píldoras...aquí cada uno es libre de comprar aquel dulce que más se asemeje a la cara que quiere crear!.... Y... voilá!!

Ah! Importante! Como me sobró chocolate de cobertura pensé que sería una buena idea presentarlas sobre una tela de araña de chocolate, que gracias a una manga pastelera pude crear.
Qué os parece?
Es algo fácil, diferente y muy divertido para tus pequeños Spidermans!!
Gemma






miércoles, 23 de octubre de 2013

Para la Castañada... Ricos panellets!!!!

Mi cuñada Mónica desde que está con mi hermano -y creedme que de eso ya hace muchos años (15 ni más ni menos!!!)- nos deleita por estas fechas con unos riquísimos panellets hechos por ella. Los panellets son unos pequeños dulces muy típicos en esta época en Catalunya, cuya receta se basa en una pasta parecida al mazapán, hecha con boniato o patata, almendra y azúcar.

Yo nunca los había hecho y hará cosa de un año pensé que ya era hora, y como Nerea siempre disfruta ayudándome en la cocina, pensé que era un buen momento para que Éric se nos uniera.
Hice un montón de fotos, pero no sé qué ha pasado porque han desaparecido más de la mitad :( ... De todas formas tenía muchas ganas de compartir con vosotros el buen momento que pasamos y de alguna manera haceros participes de él. Si os animáis a hacerlos ya sea solos o en compañía espero que disfrutéis tanto como lo hice yo.

Antes de seguir me gustaría dar algunos datos históricos, para culturizarnos un poquillo...

Los panellets son un dulce típico de Cataluña, Aragón, Valencia y Baleares que se preparan según la tradición para comerlos el 1 de noviembre, día de Todos los Santos, o como se conoce en Cataluña y Aragón: la castañada. Tal y como se conocen hoy día datan del siglo XVIII y se compartían después de las celebraciones religiosas como comida bendecida. Hay dos versiones de su posible origen, por un lado la que defiende que éste está en el norte de Europa, donde, para soportar el intenso frío de la larga noche de difuntos necesitaban un alimento rico en calorías; y por otra la que considera que dada su composición a base de almendras  su procedencia puede estar más ligada a la repostería árabe.
En cualquier caso, al ser una comida muy energética,  resultaba muy útil para comer el Día de Todos los Santos o Día de Difuntos, ya que se tocaban a muertos en las campanas de las iglesias durante toda la noche y por lo que la mayor parte de la población hacía vigilia.
En 1807, según el Baró de Maldà, eran ya muy populares y se vendían en la calle.

Bueno, ahora sí, después de saber alguna cosilla más, aquí os dejo la receta:

Ingredientes:

Masa base
- 250 gr de almendra cruda molida
- 200 gr de azúcar
- 150 gr de patatas o boniato (yo los hice con patatas)
- La piel de medio limón rallada

Panellets de piñones
- 70 gr de piñones
- 1 huevo
 
Panellets de coco
- 60 gr de coco rallado
- 1 yema de huevo

Panellets de almendras
- 80 gr granillo de almendra
- Clara de huevo


Preparación:

Masa base
Cocer las patatas con piel. Una vez cocidas, escurrirlas y pelarlas. Triturarlas cuando aún esten calientes. Una vez hecho el puré dejarlo enfriar completamente (yo lo hice de un día para otro, y más aún porque como pretendía hacerlos con los peques no creí que fueran a tener la suficiente paciencia como para esperar mientras se enfriaba).
Una vez tenemos el puré a la tempreratura correcta hay que añadir el azúcar, la almendra molida y la piel de limón rallada. Mezclar los ingredientes con un tenedor, sin removerla excesivamente para que no se reblandee, hasta que quede bien uniforme.
Con esto, ya tendríamos la base para hacer los panellets.

Es importante que para trabajar la masa y dar la forma nos enharinemos bien las manos para que nos se nos enganche.

Panellets de piñones

 
Nerea disfrutó un montón haciéndolos! Mirad que concentrada estaba!
 
Cogemos trozos de masa y hacemos bolas pequeñas, las pasamos por la clara de huevo y las cubrimos con piñones. Los colocamos  en la bandeja del horno, previa colocación de papel de hornear, y los pintamos con la yema del huevo.

Panellets de coco

Éric más que ayudar fue haciendo una cata de los ingredientes.
Creo que el coco fue el que más le gustó
 
En este caso hay que mezclar la misma cantidad de masa que de coco rallado (no en peso sinó en volumen, por ejemplo una cucharada rasa de masa y otra de coco). Una vez mezclado coger porciones de la mezcla y darles forma de pirámide (por ejemplo, si os gustan más las bolitas, pues bolitas). Poner más coco rallado por encima y harina por debajo y pintar las puntas con yema de huevo una vez colocadas en la bandeja del horno.
 
Panellets de almendras

Hacer con la masa barritas rentangulares. Pintar solo la parte superior con la clara de huevo y rebozar con el granillo de almendra y por la parte de abajo con harina. Por último, ponerlas en la bandeja junto con el resto de panellets.

Cocción

Cocer los panellets unos 8-10 min a temperatura fuerte 225º-250º.

Y a disfrutar!!!!

 
Que aproveche!!!

Eva

martes, 15 de octubre de 2013

El cactus viajero

¿Conocéis la película Amélie?. Aquella francesita (Audrey Tautou) que decide hacer feliz a todas aquellas personas que le rodean como si fuera una superhada madrina.
No estoy insinuando que me parezca a ella, ni en el físico, que ya me gustaría a mí, ni en su actitud, que tampoco me importaría. Os recuerdo esta película por que una de sus buenas acciones es robarle un gnomo de jardín a su padre y hacer montajes con él poniéndolo en escenarios de ciudades extranjeras y de esta manera hacerle soñar con aquellos sitios a los que siempre hubiera querido ir.

En fin, todo este rollo viene por que a principios de verano, mi hermano, que trabaja en un catering magnífico y muy original llamado Food & Mambo, me retó a hacer un cactus de trapillo de unos 50cm de alto para la decoración en los banquetes que organizan en los circuitos de motociclismo de Europa, sí, sí, por toda Europa. ¡Menuda presión!.

Estuve buscando por internet y encontré muy poquita cosa de cactus hechos con trapillo XL, todos eran pequeñitos de amigurumi y aunque pueda parecer que es lo mismo, creo que es más complicado. 

Aquí os dejo algunas directrices que hay que tener en cuenta:
Primero, la elección del trapillo, no puede ser muy flojo, es mejor que sea un pelín rígido y gordo para que mantenga la forma, de lo contrario deberemos rellenarlo e incluso ponerle dentro una estructura rígida para que se mantenga recto.
Una de las cosas que más dolores de cabeza me dio fue conseguir el codo del cactus, no tenía ni idea de como hacerlo, lo intenté con aumentos y disminuciones, tejiéndolo en dos partes; de varias maneras distintas. Hice y deshice muchas veces y durante varias noches estuve dándole vueltas hasta que conseguí un codo bastante aceptable. Lo hice combinando punto bajo y punto alto, si lo volviera hacer no sé si me saldría igual, es de aquellas cosas que vas haciendo y sin saber muy bien cómo, lo consigues. 
Una vez acabado, sólo quedaba hacerle una base del mismo diámetro que el macetero, rellenar éste de espuma de jardinería y anclarlo bien con la ayuda de silicona y unos alambres doblados a modo de horquillas que unan el trapillo de la base con la espuma.
Y eso es todo, después de varias semanas de trabajo conseguí un cactus de trapillo XXL de unos 50cm de altura.

Y según cuentan este cactus se dedica a recorrer todos los circuitos de motociclismo de Europa.

Viajando como el gnomo de jardín del padre de Amélie.

¡Ainsss. Quién fuera cactus!

Un beso

Lali

domingo, 6 de octubre de 2013

Pendientero de viaje

Sí, sí, no habéis leido mal. Hoy os traigo un antojo que tenía desde hace ya algún tiempo: un pendientero de viaje. ¿Que qué es eso? Pues no es nada más y nada menos que un objeto que nos permite llevar nuestros pendientes de un sitio a otro de manera ordenadita. Igual pensais que soy un poco freaky, pero siempre me ha resultado un poco incómodo rebuscar las parejas en la bolsita en la que suelo meterlos cuando me voy de viaje.
Llevaba mucho tiempo dándole vueltas a cómo podía hacerlo. Busqué por internet, donde encontré alguna inspiración que otra y me puse manos a la obra...

Para hacerlo he necesitado lo siguiente:

- Tela estampada de algodón (un retal de 30x45 cm aproximadamente)
- Fliselina de doble cara (30x45 cm)
- Tela para bordar (30x45 cm)
- Tira bordada
- Hilo de bordar
- Aguja
- Tijeras
- Ganchillo del 3
- Lanas de algodon peinado de diferentes colores
- 1 botón
- Plancha

 - Empecé cosiendo la tira bordada a la tela para bordar con hilo de color.
- Pegué la fliselina de doble cara con la plancha únicamente a la tela estapada (por la parte interior, claro está)






- Junté las caras que quería que se vieran de ambas telas y cosí a máquina el perímetro (dejando un huequito para darle la vuelta)


  - Una vez dado la vuelta, volvi a pasar la plancha y empecé a hacer con el hilo de algodón y el ganchillo una especie de "marco" para coserlo en pel perímetro de las telas y darle un bonito acabado al porta-pendientes. Este marco (una vuelta de cadeneta y otra de punto raso), lo cosí a mano a todo el perímetro y acabé de tejerlo con hilo de otro color. Antes de acabar hice le un ojal para pasar el botón con el que lo cerraría.
Hay que decir que este paso me lo podría haber ahorrado (porque os aseguro que es laborioso) y podía haber puesto algún tipo de beta de color o una tira bordada o puntilla o cualquiera de las múltimples opciones que nos ofrece la mercería.


- Por último, enrollé el pendientero y decidí el sitio donde debía coser el botón para poder mantenerlo cerrado.




 Estoy encantada con el resultado, aunque creo que podría haber puesto tres tiras bordadas en vez de dos y así poder poner algún pendiente más.
Lo que más me gusta es que me permite poner pendiente largos, de botón, de cierre catalán,...!

Cómo me gusta!!!

Eva





 

jueves, 3 de octubre de 2013

Tarta Sacher. La Locura de chocolate

Hoy toca un clásico.


Esta tarta la hice en julio para celebrar mi cumpleaños. Unas semanas antes de que se acercara la fecha ya estaba yo maquinando que superreceta podía hacer, no me apetecían frostings ni fondants, quería enseñaros una tarta clásica y qué mejor que la Sacher, la he hecho varias veces y la verdad es que nunca falla.

Primero un poco de historia, que no sé si os habéis dado cuenta pero me encanta descubrir la historia de cada receta y sus orígenes. 
El Pastel Sacher, o Sacher Torte es un famoso pastel vienés cuya creación debemos al maestro pastelero del príncipe de Metternich, Franz Sacher en 1814.
La Sacher casi provocó dos bandos irreconciliables en Viena. A un bando estaban los seguidores de la receta que se elaboraba en el Hotel Sacher: bizcocho de chocolate relleno de mermelada de albaricoque y recubierto por el glaseado de chocolate; esta fórmula fue defendida en los tribunales por los descendientes del creador del pastel. Pero la pastelería Demel llegó también a los tribunales en defensa de una receta en la que el bizcocho estaba recubierto de mermelada y después del glaseado de chocolate, al parecer le había sido confiada una vez que el pastelero Eduard Demel hubiese adquirido los derechos de un nieto de Sacher. Finalmente ganó la receta del Hotel Sacher, que consiguió una sentencia favorable después de un proceso que duró más de seis años. Probablemente los juzgados estaban tan colapsados como los de aquí ;).

Bueno, ya os he dado bastante la lata.
Para los que no la hagáis hecho nunca os digo que vale la pena, no tiene nada que ver con las que se compran en las pastelerías. No está tan dulce gracias al chocolate al 70%, y a la acidez de la mermelada de albaricoque, que además es casera hecha por mi madre con los albaricoques de "La caseta" de mi tía. Y el ganache de chocolate está para no parar hasta dejar el bol limpio, que fue lo que hicimos entre los niños y yo... 
Diós qué hambre!!!! Se me está haciendo la boca agua sólo de recordarlo. Qué dura es la dieta!!!.

Venga, vamos con la receta.

Receta de Pastel Sacher (Fuente: Mercado Calabajío)

Ingredientes para el bizcocho, para un molde de 23-25cm y dos pisos:

  • 125 gr de almendra molida
  • 100 gr de harina de repostería
  • 100 gr de azúcar glas
  • 100 gr de azúcar blanquilla 
  • 100 gr de mantequilla
  • 6 huevos
  • 150 gr de chocolate al 70%
  • 10 gr de levadura química
  • una pizca de sal
  • 2 cucharaditas de esencia de vainilla
  • mermelada de albaricoque
Ingredientes para la cobertura:
  • 125 gr de chocolate de cobertura al 70% (para mí, el mejor es el Lind)
  • 125 gr de nata para montar
  • 25 gr de mantequilla

Preparación:
Derretimos el chocolate al baño maría o al microondas, si elegís éste último cuidado que no se queme, a potencia media y de 30 en 30 segundos, yo tengo uno de esos chismes especiales para deshacer el chocolate que calienta a baja temperatura, esas cosas que cuando te la traen los Reyes Magos piensas "otro trasto, a ver donde lo meto".
mezclar el azúcar glas y batir hasta que quede esponjoso. Después añadimos el chocolate derretido, volvemos a mezclar y vamos incorporando las yemas, una a una y no añadiremos otra hasta que la anterior no esté bien integrada.
Las claras las mezclamos con el azúcar y las montamos a punto de nieve.
A la masa con chocolate añadimos la esencia de vainilla y la almendra molida, después incorporaremos las claras, las echaremos poco a poco, removiendo con una lengua de cocina y con movimientos envolventes de abajo a arriba, ¡No se os ocurra batirla por que perderán el volumen.

Mezclamos la harina, la levadura y la sal y la tamizamos poco a poco en la mezcla como hemos hecho con las claras.
Una vez tenemos la mezcla la dividimos en dos moldes iguales, previamente engrasados para que no se pegue el bizcocho, y horneamos a 150-170ºC durante 45-60 min, ésto depende del horno que tengáis. Estará listo cuando al pincharlo con un cuchillo éste salga limpio.
Mientras tanto vamos haciendo el ganache de chocolate: calentamos la nata al fuego, cuando empiece a hervir la retiramos y añadimos el chocolate a trozos, removemos hasta que se deshaga y a continuación mezclamos con la mantequilla.
Cuando los bizcochos estén listos los desmoldaremos y los dejaremos enfriar sobre una rejilla.
Para montar la tarta primero igualaremos los dos bizcochos para que queden bien rectos. Uno de ellos lo colocamos en la rejilla, lo pinchamos y lo untamos con la mermelada de albaricoque, una buena capa, colocamos encima el otro bizcocho.

Ya sólo falta cubrirlo con el ganache, colocamos la rejilla con el pastel encima de una bandeja de horno y echamos encima la cobertura, de esta manera el chocolate sobrante caerá en la bandeja de horno y todos podremos meter los dedos.
¡Si es que no hay quién se resista!
Nos ayudamos con una espátula para distribuir bien la cobertura, y cuando esté listo lo guardamos en la nevera.


Lo ideal es hacerlo el día anterior para que los sabores se mezclen, la mermelada se filtre por el bizcocho y la cubertura endurezca un poco (lo estoy escribiendo y se me está haciendo la boca agua).

Y ya tenéis la receta de un pastel de un clásico. Un sueño para los adictos al chocolate.
Un vício!!!!

Hacedlo, disfrutadlo y ya me contaréis.
Feliz fin de semana.

Para los curiosos, sí 38, ya queda menos para los 40. No, no se me ha colado la foto, este NY cheesecake lo hice también para mi cumple, ya os daré la receta (¿Os gusta mi standcake? Regalito de cumpleaños <3.

Lali